La teoría realista no distingue entre naciones “buenas” o “malas”, sólo le interesan los factores estructurales que empujan a las naciones a entrar en conflicto
Author: Emilio Meneses
El Sistema Internacional – Cap. I : Teorías de cómo funciona el mundo
Existen dos grandes corrientes en boga para explicar el orden internacional: la Teoría Liberal y la Teoría Realista. Ambas teorías se pueden considerar contrapuestas, pero tienen al menos un factor en común: consideran a los estados como los actores principales del sistema internacional
Jerusalén: Crónica de una embajada anunciada
Por mucho que los palestinos sientan que su causa es legítima y justa, si quieren poder recuperar algo primero deben aceptar lo que tienen y luego crecer económicamente para competir en el futuro con Israel.
Trump, Irán y la bomba atómica
Tal pacto no buscó impedir que Irán desarrolle la bomba atómica, sólo retrasarla, y a cambio podía dominar Medio Oriente.
La paz de nuestros tiempos
Esta semana sucedió algo inaudito en la península coreana: ambas naciones acordaron firmar una paz definitiva después de estar … More
¿Por qué indignarse con esta imagen?
Es fácil entender porque una persona … al ver la foto del helicóptero salte furiosamente
La no violencia versus la sociedad armada
En 1956, después de un sufrir un atentado en su casa, Martin Luther King Jr solicitó permiso para poseer y portar un arma, la policía discriminatoriamente le negó el permiso. ¿por qué MLK, quien propulsaba la no violencia, querría tener un arma?
Los ecos del ataque en Siria
Este ataque es un boost para la posición internacional del presidente Trump, es alguien que materializa sus amenazas militares.
La razón de estado turca
La foto de la reciente reunión entre Erdogan, Putin y Rouhani indica lo rápido que pueden cambiar las alianzas y relaciones de poder en el sistema internacional. ¿cómo fue posible que un miembro histórico de la OTAN de pronto se volviera tan cercano y amigable con el enemigo estratégico de esta misma alianza?
Fascistas contra Conservadores
Es muy cómodo tergiversar y caricaturizar al oponente, te ahorra el esfuerzo de tener que escuchar su argumento, entenderlo, comprender sus fortalezas y mostrar sus debilidades. Muchos prefieren tildar a alguien de fascista porque les permite ser intelectualmente perezosos